Tuve un sueño José. Creo que se trataba del nacimiento de Nuestro Hijo.
Creo que sí, era acerca de eso. Fue como una pesadilla, pues nadie lo tenia a El en cuenta,
era como si lo más importante fueran los otros.
La gente estaba haciendo los preparativos con mucha anticipación.
Decoraban las casas y compraban ropa nueva. Salían de compras muchas veces
y adquirían elaborados regalos.
Era muy peculiar, ya que los regalos no eran para nuestro Hijo.
Los envolvían con hermosos papeles y los ataban con preciosos moños,
y todo lo colocaban debajo de un árbol.
Sí, un árbol, José, dentro de sus casas. Esta gente estaba decorando el árbol también.
Las ramas llenas de esferas y adornos que brillaban.
Había una figura en lo alto del árbol. Me parecía ver un ángel.
¡Oh! era verdaderamente hermoso.
Toda la gente estaba feliz y sonriente.
Todos estaban emocionados por los regalos, se los intercambiaban unos con otros.
Sus regalos eran lujosos, y bebían, y nadie miraba al protagonista de esta fiesta.
En la fiesta estaban todos los invitados con lujosos vestidos .
Sonaron las campanas y se daban abrazos entre ellos, bailaban y bailaban y reian,
pero nadie se acordo de mi Hijo, fue una pesadilla al ver que mi Hijo era ignorado
por aquellos a que Dios les había concedido la gracia de vivir, de trabajar,
de gozar de buena salud, y nadie lo tenia en cuenta.
Como duele ver que muchos no se acuerdan del quien les dio la vida.
Hoy despues de dos mil años muy pocos celebran una Navidad Santa.
José, el amor por mi Hijo se ha perdido, el dinero, la fama,
los primeros puestos, los titulos y el poder, el buen nombre los tiene dominado,
no trabajan por amor,sino por ser aplaudidos, y reconocidos como grandes,
cuando ni siquiera sus nombres estan escritos en el cielo, porque sus obras están muertas.
Este mundo se ha perdido en las tinieblas y no quieren buscar la única luz
que los ayuda a salir de esa oscuridad. No comprenden que todo es pasajero
y que un día desaparecerá todo esto que han construido y que nada quedará en tierra.
Este sueño es una realidad que veo a diario en mis hijos más queridos,
muchos de ellos sólo piensan en vivir una Navidad llena de regalos...
y mis otros hijos?...los mendigos, los enfermos, los despreciados, los más pequeños?
Quién se acuerda de ellos?
¿No te parece extraño que la gente se meta en tantos problemas para celebrar
el cumpleaños de alguien que ni siquiera conocen?. Tuve la extraña sensación
de que si nuestro hijo hubiera estado en la celebración hubiese sido un intruso solamente.
Todo estaba tan hermoso, José, y todo el mundo tan feliz.
Qué tristeza para mi Hijo, no ser el protagonista en su propia fiesta de cumpleaños,
Este sueño se ha convertido en una pesadilla para mi, porque se celebra Navidad
sin respeto, sin amor, donde sólo abundan los colores y las formas .
José, ojalá esto fuera un sueño, sólo un sueño....
y José contempló a Maria, mientras una lagrima corria por su mejilla.