¡Oh Santa Madre
y clemente Virgen del Rosario,
Tú que plantaste en la Iglesia
por medio de tu hijo Santo Domingo,
el místico árbol del Santo Rosario,
ayúdanos a abrazar tu santa devoción ...
y a gozar siempre de su verdadero espíritu;
de suerte que aquellas místicas rosas
sean en nuestros labios y corazón,
medicina celestial para los pecadores,
y aumento de Gracia y bendiciones
para los santos y justos...
y clemente Virgen del Rosario,
Tú que plantaste en la Iglesia
por medio de tu hijo Santo Domingo,
el místico árbol del Santo Rosario,
ayúdanos a abrazar tu santa devoción ...
y a gozar siempre de su verdadero espíritu;
de suerte que aquellas místicas rosas
sean en nuestros labios y corazón,
medicina celestial para los pecadores,
y aumento de Gracia y bendiciones
para los santos y justos...