jueves, 23 de agosto de 2012

SAN AGUSTIN

Recorrí mis caminos con pena y amargura.
Tenía mi corazón dividido en mil pedazos,
mientras vivía alejado de Ti, que eres,
la eterna y soberana unidad.
Deseaba ardientemente saciarme

de las cosas de acá abajo.
Embriaguez que padecemos los hombres
causada por el vino invisible
de nuestra mal inclinada y perversa voluntad.
En esta embriaguez vive este mundo
olvidado de Ti que eres su Creador

San Agustín de Hipona.